domingo, 27 de septiembre de 2009

17 de octubre de 1999. Dia de la Madre

Cinco minutos antes de despertar, soñè con mamà... ¡Fuè tan ella ...!!! La vi limpiando un piso que momentos antes, habìa lavado papà ... advirtiò que no estaba bien lavado.
El contenido del sueño no tiene importancia. El detalle fuè soñarla hoy, justo antes de empezar el dìa.
Y el otro detalle, es que Mary y Nèstor (los dueños del locutorio), me hicieron el primer regalito del dìa, un pequeño y bonito angel de la guarda.
Lo puse sobre mi mesa de luz, y cada noche rezarè como me enseñò mi abuelita: "angel de la guarda, dulce compañìa, no me dejes sola, ni de noche ni de dìa" ... y me harè como niña para que me lleve al Señor , y me dejarè mirar y sanar por Èl.
Y cada mañana le pedirè que se meta en mi huesito de la muñeca izquierda (como tambièn me dijo mi abuelita) y se venga conmigo adonde vaya.

Antes de levantarme puse mis manos sobre mi panza, esta panza fea y estirada que hoy, a mis casi 52 años luzco. Y me diò orgullo de ella, porque fue nido por cuatro veces ... y recordè mis cuatro embarazos ... y recordè que las ya hoy cuatro mujeres, fueron embriones, fetos y recièn nacidas.
Puse tambièn mis manos en el corazòn, nido genètico de mi Negrito.
Y por largo rato me sentì joven.
A medida que cada uno me dijo "feliz dia", y los vi grandes ... y los escuchè lejos, me sentì "mamà vieja".
Almorzamos en lo de Soledad. Estaban ella, Carina y el Negri. Verònica y Silvina llamaron por telèfono. Mi intelecto entendiò, (como corresponde), que no podìan venir. Pero mi corazòn, que a veces no entiende razones, pataleò, llorò y se tirò al suelo. Pero nadie lo sabe,ni ellas. Porque no se los dije "para no preocuparlas".
Y ahora que lo pienso ... eso mismo les pasarìa a ellas, cuando me esperaban todo un dìa, y me extrañaban, y yo llegaba tarde y cansada. Y ni siquiera me contaban sus cosas "para no preocuparme".
¿Cuànta "terapia" me llevarà sanar el tiempo perdido?

sábado, 26 de septiembre de 2009

el diario de Ana en Mèxico

De este modo, empiezo lo que, algùn dìa quizà, pueda ser mi libro soñado: el diario de Ana (en Mèxico). Si no se da, al menos me doy el gusto de escribirlo aquì. En realidad, ya lo tengo escrito en varios cuadernos y en la computadora. Desde ahora en adelante, irè volcàndolo aquì, pare ir editàndolo un poco.
Que nadie que lo lea, se asuste por esta "primer entrega". Es que quiero empezar un poquito antes, para que se le encuentre sentido a lo que viene despuès. Por eso empiezo por algo que escribì en mayo de 1999. Lo leo ahora y me parece increìble ... despuès de todo lo bueno que comenzò a pasar en el 2002.

Mièrcoles 26 de mayo de 1999

No puedo màs ...!!! Y no puedo ni quiero, decìrselo a nadie. Estoy en el locutorio, son las 14:53 exactamente. Es tan grande mi desazòn, mi dolor, mi angustia, mi desesperanza ...
No puedo siquiera describir exactamente lo que siento ...es como si estuviese sentada en el piso de un "presente" finito, frìo,y vacìo ... àtona ... sin fuerzas, ni de dònde sacarlas.
A mi izquierda hay una enorme ventana con un vidrio fijo, que da a un pasado iluminado, desde donde me miran cosas y personas a las que no puedo tocar ... un lugar adonde no puedo volver.
En ese lugar està mi mamà, mi papà, mi casa de la calle 15, los partidos de Ferro de los domingos, de la mano de mi papà, los 15 chicos jugando bajo el farol de la 15 y la 12 en las noches de verano.
Oscar viniendo por la 24 y mi corazòn salièndose por la boca, un ardiente e inconciente deseo de estar juntos ...
Mis hijas chiquitas me saludan con sus manitos ... sus delantales blancos que ya nadie usa... las mochilas con làpices sin punta y plasticolas a medio abrir ...
La Estaciòn de Servicio ...
Las chicas en el baile de fin de curso ... los ojazos del Negri asomàndose apenas por sobre un plato de tallarines ... los ojos de Lili, llenos de preguntas y miedos ... El Mallìn ... los primeros Retiros ...
Los 25 años de lucha diaria para "cubir el banco" ...
Mi papà en la camilla, cubierta la cara , lo que decretaba su muerte, calentito aùn y yo rezando con el boca y con el alma el Dios te salve Reina.
El angel Juancito de mamà ... el tiempo oscuro de mi fè ... la Renovaciòn Carismàtica ... el viaje a Chile ... Normy ausente por 5 años ...
Verònica en Australia ... Silvina casada ... ¡Cloè!!!!!!!! miràndome con ojos de gatito ... Soledad con Fabiàn en su casa ... Nicole en brazos, en neonatologìa y yo dicièndole "la abuelita soy yo ... la que està en la pieza es la mamà de tu papà" ...
Nuestro primer logro en Amway: 21% ... Seminario de reconocimiento en Tandil y, al dìa despuès entregando a mi mamà en brazos del Señor que vino a buscarla un domingo 13 de octubre a las 13:30 (casi ni la extrañè ... la veìa tan poco ...!!) Tambièn se fuè la tìa Pety poco antes ... justo en el ùltimo Ave Marìa del Rosario que yo rezaba sentada a su lado.
Y me veo rodar con mucha fuerza cuesta abajo: el Negri se droga ... mi suegra me mira desde su silla de ruedas ... el banco se quedo con mi casa y la de Verònica (cuànto dolor ...!!!). Rematan 30 años de mi vida màs 30 años de la de Oscar, màs la infancia, adolescencia y juventud de mis hijos ... todo esto, el dìa que bajan el martillo a la estaciòn de Servicio. Me veo con cara de duelo interminable.

Sigo sentada en el piso muy friò de mi presente finito.

A mi derecha una pared que no me deja ver el futuro. Que tampoco quiero ver. Quizà porque hoy sè que lo que ocurra tiene mucho que ver con lo que haga en el presente. Y no veo que pueda hacer gran cosa. Està tan vacìo ... lo ùnico que hay en èl es una rutina casi "aplastante": levantarme, limpiar, comer, trabajar, vender productos, cenar, acostarme ... a veces soñar (sòlo dormida) y ... otro dìa igual ...!!!
Dependiendo de un modo axfisiante del dinero que no tengo. Midiendo todo como si fuera lo ùltimo que voy a tener. Extrañando como loca a las nenas. Sangrando el alma por no poder hacer un regalito a nadie. Teniendo por primera vez en mi vida "patrones". Encontrando una pseudo seguridad en $ 220 por mes ... trabajando todos los dìas de la semana.

Al fondo, al frente de este presente friò y vaciò, hay un escenario al que me subo unas cuàntas veces al dìa y actùo de lo que los demàs quieren ver y escuchar. Y al oir los beneplàcitos y agradecimientos, masajeo este indomable ego y me creo la sùper mujer.
Cuando bajo del escenario, ya sin pùblico, me enrosco en mi silencio y mi soledad màs profunda, me meto en ese lugar absolutamente inalcanzable para todos, y me saco el disfràz, me miro al espejo y veo a la que soy verdaderamente. Y veo una mujer desconocida (de tanto actuar otra), con màs de 50 años, muchos dolores fìsicos, sìquicos, espirituales y, sobre todo y sorprendentemente nuevos y agudos dolores sentimentales.
Siento absolutamente opacados los sentimientos que durante 35 años experimentè por Oscar. Juzgo absolutamente todo lo que hace, dice, piensa. Es algo incontrolable. Siento una tremenda soledad e inseguridad a su lado.
Seguro la equivocada soy yo. Pero lo urgente no me deja ver lo importante.
Fuimos vendiendo cosas para poder "llegar". Lo ùltimo sonlas acciones del BLP, que nos auxiliaràn por 2 ò 3 meses. Nos quedan aùn unas pocas cosas de oro, con lo que llegaremos a fin de año ... y despuès que ...? ¿ ... el alma al diablo?
Ese parece mi plan, cuando no pocas veces, pienso en el modo màs barato y menos penoso de "pasar a mejor vida"

viernes, 25 de septiembre de 2009

Don Pànfilo

Viernes 25 de septiembre

Don Pànfilo ... en Argentina, decirle "pànfilo" a alguien, es como un pequeño insulto, sinònimo de tonto o algo asì.
En Mèxico, Pànfilo es un nombre (debe haberlo sido siempre, supongo).
En Argentina quizà habrà habido alguien de nombre Pànfilo que haya sido medio tonto ... bueno, no se.
A lo que iba, es a que en "el albergue", conocì a Don Pànfilo, y me quedè prendada de èl, por eso, quiero "llevarlo" en la memoria por mucho tiempo, y se me ocurre que lo mejor es "aparcarlo" en este espacio.
Don Pànfilo es un señor que podrìamos llamar "viejito" (no puedo calcular su edad), pero algo asì como unos 68 ò 70 años bien gastados. Es muy "chaparrito" (bajito) ... delgado ... de pelo cano bien cortito. Tiene unos bigotes ralitos que se convierten en una pijotera pèrgola de su boca pequeña.

Su ropa es muyyyyyyyyy usada, pero limpita y cuidada. En sus pies lleva unos guaraches gastados (sandalias) y viejos, que se las arreglan para proteger un poco sus pies. A sus pies, como alguna vez escuchè, "ni un indulto presidencial, los libera de tantos y tantos años de pesado trabajo" ... al menos, eso denuncian las grietas en sus talones y las uñas gastadas de sus dedos.
Segùn el mismo còntò, vive en un pueblo cuyo nombre no recuerdo, en medio de las sierras de Chiapas ... a 18 horas del DF (en "camiòn" (autobùs), por supuesto). Alguien se puso a buscar ese pueblo y ni siquiera figura en el mapa. Segùn Don Pànfilo "is qui ni vale la pena, m`hijo ... si somos sòlo 250 almitas por allà"
Josè Antonio es el hijo de Don Pànfilo, y estaba operado del corazòn ... "mu feo lo de m`hijo ... mu feo" ... "istà grave m`hijo ..., pero, primero Dios (si Dios quiere), si va componer pronto".
Todo el mundo mimaba a Don Pànfilo ... yo tambièn. Le dàbamos primero de comer ... le lavàbamos sus platos ... le cedìamos la silla.
Don Pànfilo se lo ganò ... se le veìan años de servicio y de trabajo. Y ahora estaba sufriendo mucho por lo de su hijo ... y tenìa tiempo todas las mañanas para colgarse una sonrisa en la cara,
antes de que Dios colgara el sol en su ventana.
Yo vi a Don Pànfilo sostener a su hijo Josè Antonio, saliendo del Hospital un dìa antes que Oscar saliera ... y me alegrè tanto ... !!!
Que Dios los bendiga, Don Pànfilo ... nunca lo olvidarè ... ni a su hijo ... Que vivan mil años en Chiapas ...

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Dios es màs grande que el Templo



A fines de abril fuimos a España. La gripe nos dejò varados en el Aeropuerto y nos regalaron 12 horas de estadìa en un hotel de Barajas, un lindo pueblito español, una especie de pequeño satèlite de Madrid.
Aprovechamos para caminar un poco y conocer los alrededores. Fuimos a una Iglesia ... entramos y al salir, desde el fondo del alma se me ocurriò escribir lo siguiente:


Era la tarde en Barajas,
caminando por sus callejas,
entrè a una Iglesia de piedra,
... estaba frìa ...
... estaba oscura ...
candada y con unas rejas.
Dios no estaba dentro...
Àvida salì a buscarlo afuera.
Y me acariciò en el viento ...
cantò para mì en ese pàjaro ...
me arropo en el sol de invierno.
Dios me mirò a los ojos
en la mirada de un viejo ...
Dios no estaba adentro ...
Dios es màs grande que el templo.

martes, 22 de septiembre de 2009

El albergue

Albergue: "lugar que alberga" (una de las acepciones). Este "albergue" al que me refiero, es el del Instituto Nacional de Cardiologìa (el Cardiològico, como lo conocen todos los mexicanos).
Es un lugar donde se alojan los familiares (y a veces los pacientes dados de alta), que vienen de lejos.
Lo encontrè porque Dios quiso, como encontrè tantas cosas y personas en estos dìas de "zozobra" si se pueden llamar asì.
Cuando estaba en medio de la tormenta ... sola, sin saber bien dònde pasar las noches y los dìas que me esperaban, que ni siquiera sabìa cuàntos serìan, una de las guardias de la entrada al hospital, me desliza al oìdo la idea de ir a pedir un lugar al albergue (que yo ni sabìa que existìa). Y agregò: "vaya usted, y pregunte por la Srta. Olivia, o sor Martita, asì ven que usted conoce ya el lugar" (y yo jota de nada, por supuesto)
Y fuì ... y toquè la puerta que me dijeron. Una puerta chiquita, disimulada, de poca importancia, como perdida en medio de un paredòn que da sobre Viaducto de Tlalpan, a sòlo 50 metros del acceso de visitas del "cardiològico".
Y me atendieron ... y me dieron albergue.
Un lugar de esos que no tienen precio ... porque tienen demasiado valor.
Por sòlo 15 pesos mx (un dòlar y 10 ctvos), me ofrecieron cama, desayuno, comida, cena, baños con agua caliente ... un piyama ... y mucho, mucho amor y comprensiòn y contenciòn ... y què se yo cuàntas cosas màs.
Un lugar donde uno descubre a poco de estar que no alberga personas ... alberga historias.
Ahì se funden y confunden el dolor y la alegrìa ... El dolor de los familiares por sus enfermos. La alegrìa de ellos y de todos los demàs por cada paciente recuperado.
Ahì todas las personas y todas las historias se hacen una y se abrazan frente al dolor de las pèrdidas ... que no son pocas, porque hay que entender que estamos todos en la misma: nuestros pacientes, tienen el corazòn enfermo ...
Y hay de todo: mujeres, hombres ... jòvenes, menos jòvenes ... y lo màs tierno y conmovedor: hay niños enfermos, niños internados, operados, esperando que los operen ... Y en el albergue estàn los padres, esperando las fechas de las cirugìas, esperando la hora de la visita, para ir a verlos.
Conocì ahì a personas a las que no olvidarè nunca.
En otras entradas, contarè algunas historias breves de ellas. Por hoy, sòlo decir lo que fueron para mì esos 10 dìas en "el albergue":
"una muestra gratis de Cielo"

lunes, 21 de septiembre de 2009

Tengo un blog .!!!!!!!

Si, al fin tengo mi blog ... que ni se lo que es, pero lo tengo. La idea me la diò, ver el blog de Cloè, en su aventura en Italia.
Bueno, este serà algo asì como "mi aventura en Mèxico".
Por hoy, sòlo estoy probando que puedo hacerlo. Soy totalmente "dura" con todo lo virtual y cibernètico, pero lo intentarè ... SI, SE PUEDE ... y seguro podrè, aunque deba recurrir a la ayuda de Cloè.
Tengo 7 años de vivencias para ir escribiendo. Serà poco a poco ... y quizà en desorden, pero intentarè ser fiel a la descripciòn, lo màs acertada posible, de todo lo vivido hasta el momento ... y lo que aùn queda por vivir.
Quizà comienze con los recuerdos màs frescos, luego recurrirè a lo que ya tengo escrito y lo irè pasando a este lugar.
Por hoy, me basta con haber abierto este espacio ... buenas noches familia ... buenas noches amigos ... aunque nadie lo sepa aùn, en algùn momento los harè partìcipes de este "lugarcito" donde irè dejando parte de mi corazòn ...