lunes, 2 de noviembre de 2009

Para PAPI ... mi papà, el dìa 11 de octubre del 2007

Papi ... a 20 años de tu “partida”


A riesgo de caer en citas comunes: “parece mentira” que ya hayan pasado 20 años. En nùmeros son muchos, pero en sensaciòn no parecen tantos. Es que, como dijo hoy Diana, estàn tan frescos los recuerdos, que no parecen 20 años.

Recièn, caminando “cuesta arriba” por las callecitas empedradas de Santa Marìa, pensaba en esto de “fallecer”, “morir”, “dejar de existir”, y ninguna de las definiciones, por llamarlas de alguna manera, se me hacìa aplicable a la “partida” de papi.

Una persona como èl no muere nunca, no deja de existir nunca. La memoria de quienes lo amamos, lo disfrutamos, lo conocimos, no lo dejan “dejar de existir”.

Èl siempre existirà en el recuerdo y en las vivencias diarias mìas , por ejemplo. Y eso lo transmitì a mis hijas y ellas a sus hijos. Y eso serà asì siempre. Y generaciones sabràn quièn era “papi”, “don Carmen”, o còmo mejor prefieran nombrarlo.

Un hombre ejemplar en muchos sentidos, por no decir en todos y entonces ganarme la benèvola sorna de Juanca. Un padre de esos a los que habrìa que sacarle fotocopias. Un marido del que, aunque no me toque a mì catalogar, puedo dar fe de su paciencia, de su respeto por la familia. Un hombre comùn, con los mismos o màs problemas que muchos de sus contemporàneos, que tenìa la capacidad de dejarlos en la puerta de la casa cada noche al llegar. Al menos nosotros, sus hijos, nunca nos dàbamos cuenta de cuànto le pesaban. No mientras fuimos chicos, y eso se lo agradezco hasta el dìa de hoy.

Un tipo comprometido y congruente con sus valores y sus principios. De èl aprendì que “lo que no es tuyo, no es tuyo, asì de simple” ... “que siempre hay algo para dar al que màs lo necesite” ... “que cuando des, no hieras la dignidad del otro” ...”que el que grita, es porque se le han acabado los argumentos” ...”que la gente siempre tiene una razòn para reaccionar como lo hace, y hay que comprenderla” ...”que las instituciones intermedias de un pueblo necesitan del compromiso de sus habitantes, pero no son trampolines polìticos de nadie” ...”que el que afloja pierde y no hay mal que dure 100 años” ... y tantas, tantas otras cosas.

Creo que nacì antiperonista e hincha de Ferro porque me lo transmitiò celularmente. Y lo serè hasta la muerte. Y no en homenaje a èl, sino porque me circula en las venas.

Recuerdo su cara, las arrugas de su frente, su pelo peinado con “gomina”, el surco que le habìan marcado las patillas de los anteojos. Lo recuerdo con su pañuelo al cuello, su camisa clara de mangas cortas, el pantalòn a la cintura y un cinto marcando el ecuador de su barriga. Sus zapatos Guante, color negro, y su aroma a Old Spice.

Recuerdo las mañanas de domingo metidas Susana y yo en “la cama grande”, escuchando el cuento de Juancito el Zorro, o leyèndonos los cuentos de Vigil, de ese libro de tapas enteladas color marròn, que sòlo èl podìa tocar. Mami cebando mate y nosotros queriendo que la mañana se haga eterna debajo de las sàbanas calentitas.
Recuerdo las idas al “campo” los domingos, llevando merengues o un postre que a la Mare le gustaba. Recuerdo los partidos de Ferro, los domingos a la tarde. Especialmente en el invierno, mamà tejiendo arriba del auto y yo junto a èl, detràs de la baranda, gritando cuando èl gritaba, callando cuando èl callaba.

Recuerdo las kermeses de los Italianos, cuando compraba toda la serie de la rifa de una caja de bombones Saint. Sus llegadas en el tren de la mañana temprano de un dìa cualquiera, procedente de Buenos Aires, trayendo una caja de bombones de regalo, que mi mamà cuidaba “para que duraran”. Todos envueltos en papeles de colores. Sabor intrasferible de rellenos de turròn, de frutilla, de dulce de leche ...

Recuerdo cuando me enseñaba a jugar al ajedrez y a tomar un sorbito de whisky que tanto le gustaba.

Recuerdo el tìpico olor de sus habanos, fumados lentamente, saboreados y hasta como con un mimo agradecido por dejarse degustar.

Lo recuerdo presidente de Ferro, vocal de la cooperadora policial, director del Banco de la Pampa, intendente, presidente de Cicar ... lo recuerdo activo, participativo, caritativo. Se que mucha gente disfrutò de de èl, de su trabajo de su cooperaciòn, de su amistad.

Pero presumo, papi, de que nadie, nadie, te disfrutò tanto como yo. Te admirè, te amè, te imitè como nadie lo puede imaginar. Te admiro, te amo y te sigo imitando ... por eso no puedo aplicar lo de “dejò de existir” porque eso no sucederà mientras vivas en mi memoria y me ocupè hasta hoy y me ocuparè hasta “mi partida”, de dejar impresa en la memoria de tus descendientes, que fuiste y seràs siempre ALGUIEN ESPECIAL.

Ahora que me toca estar lejos por un tiempo de ese General Pico por cuyo crecimiento y desarrollo luchaste tanto y tan desinteresadamente, se me ocurre reclamar una calle que lleve tu nombre. Bien merecido lo tenès. Pero me da miedo de que tengas que compartir alguna esquina con alguno de esos nombres que no pueden ni rozar el tuyo. De todos modos, creo que te lo mereces y espero no morir antes de ver una calle con tu nombre, haciendo esquina con el nombre de muchos de tus contemporàneos ... esos que compartieron tus sueños, tus luchas, tus ideales.

Se que estàs acà, leyendo esto en mi mente antes de que pueda ponerlo en palabras escritas. Se que no estoy loca cuando “te huelo” en ese fuerte olor a habano que nos invade màs de una vez a Oscar y a mi, y nos miramos y los ojos se nos humedecen ... y no hay palabras, sòlo una comuniòn indescriptible que se hace posible porque nunca, nunca nunca, “dejaràs de existir”

3 comentarios:

  1. Ay mami!! leo lo que escribis de tu papa y lo recuerdo tal cual lo describis, yo tambien lo extraño, distinto que vos, pero lo extraño ..y a Rina...como la extraño!!!!Me gustaba ir a visitarla, me gustaba su casa, el piano, los sillones...todo, muchas veces tengo ganas de volver a esa casa de la 24.La semana pasada, cuando preparabamos la c"carpeta de campo" como llamo Luisi a su carpeta de trabaajo para la feria de ciencias, me vinieron muchos recuerdos, mirando fotos...esas que me saque en la puerta de su casa, conm las botas caña alta, portafolio y el guardapolvo blanco. Me encanta recordar y ultimamente tengo muchos rcuerdos de la infancia...me estare poniendo vieja, jajajja.
    Me encanta leer lo que escribis, ya te lo dije muchas veces, segui...que se lo guardo a las nenas de recuerdo.
    Te quiero!!!!!

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  2. Ay, mami... si hay algo que nos transmitiste y sigue a una nueva generación es que la sangre es sagrada y hay que honrrarla viviendo lo más cercano a como lo hicieron "nuestros hernoes anónimos" como bien lo dijo cloé.
    Que agradecida le estoy a la vida que me haya regalado la bendición de tener semejantes ABUELOS.
    sEGUÍ ESCRIBIENDO MA, PARA LOS PEUQES, POR SI SE NOS PIERDE ALGO EN EL CAMINO..

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  3. abuu que hermoso! que honor.. y que orgulloso que debe estar tu PAPA de estar leyendo esto "en tu mente".
    te amo

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